Este año no comenzó de la mejor manera para la familia real británica, sobre todo en lo que respecta a la salud de parte de sus miembros. Es que tanto Kate Middleton, la esposa del príncipe William, como el rey Carlos III anunciaron que estaban luchando contra una enfermedad. Pese a que ninguno de los dos brindó demasiada información sobre su tratamiento, en las últimas horas, el monarca británico reveló cuál es el efecto adverso que le provocó la quimioterapia.
Según consignó el medio ABC, el hijo de Isabel II y Felipe de Edimburgo se refirió a su cuadro en medio de una visita conjunta con el Príncipe William al Museo de Vuelo del Ejército en Middle Wallop (Hampshire), cuando se encontró con Aaron Mapplebeck, un veterano del Ejército británico, quien también sufrió la misma enfermedad.
Mapplebeck le dijo al rey que había perdido el sentido del gusto durante su tratamiento. Fue entonces cuando Carlos III confesó que a él le había ocurrido exactamente lo mismo. Sin embargo, no mencionó si se trata de un efecto temporal o si continúa sufriéndolo al día de hoy.
Aunque nunca reveló qué tipo de cáncer tiene, fuentes de la casa real manifestaron que no se trata de cáncer de próstata, algo que se especuló desde un principio, ya que la operación que se sometió en el hospital privado London Clinic era en contra del agrandamiento de esta glándula.
Durante las primeras semanas de haber anunciado el diagnóstico, el exesposo de Lady Di canceló su agenda, pero poco a poco fue retomándola. De hecho, hace unos días participó en la primera ‘Golden Party’ de Palacio.
El 5 de febrero de este año, luego de dos semanas de la operación del monarca británico, el palacio de Buckingham emitió un comunicado con el que anunció que el padre de los príncipes Harry y William padecía cáncer.
“Durante el reciente procedimiento hospitalario del rey por un agrandamiento benigno de la próstata, se observó otro tema de preocupación. Las pruebas de diagnóstico posteriores han identificado una forma de cáncer”, informaron en un comunicado, en el que no dieron mayores detalles sobre la patología.
El monarca había decidido entonces hacer pública su intervención de próstata para incentivar a más hombres a hacerse controles. Y dio resultados: la organización benéfica Prostate Cancer UK informó que había observado un aumento de más del 100% en el número de personas que utilizaban su verificador de riesgos en línea al día siguiente del anuncio.
“Su Majestad ha decidido compartir su diagnóstico para evitar especulaciones y con la esperanza de que pueda ayudar a la comprensión pública de todos aquellos en todo el mundo afectados por el cáncer”, detalló al respecto el anuncio.
“El rey agradece a su equipo médico la rápida intervención, que fue posible gracias a su reciente procedimiento hospitalario. Sigue siendo totalmente positivo acerca del trato recibido y espera volver a desempeñar plenamente sus funciones públicas lo antes posible”, completó.
LA NACION