El gobierno de Texas comenzó a emitir tarjetas que cumplen con la Ley Real ID desde el 10 de octubre de 2016. Han pasado ocho años, tiempo en que las tarjetas han cambiado de diseño, pero mantienen un distintivo que las hace diferente e identificables a la vista, se trata de una estrella dorada en la parte superior derecha. Para este 2024, así es como se ve una identificación que cumple con la norma federal.
Fue en 2005 cuando el Congreso de Estados Unidos aprobó la legislación en respuesta a los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001. Con ella se exige a los estados que adopten e implementen normas uniformes de seguridad para la emisión y producción de licencias de conducir y tarjetas de identificación. Lo anterior es condición necesaria si se pretende que sean aceptadas como documentos de identidad para ciertos propósitos.
En febrero de 2020, el Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS, por sus siglas en inglés) dio a conocer que comenzaría a emitir las licencias de conducir (DL, en inglés) y tarjetas de identificación (ID, en inglés) con un nuevo diseño y características de seguridad mejoradas, elaboradas de policarbonato, un material más resistente a la manipulación y más difícil de reproducir. Además, lleva un grabado láser para brindar una capa adicional de protección contra alteraciones y falsificaciones.
“Como parte del nuevo diseño, habrá un identificador en el frente de la tarjeta para aquellas personas que tengan una condición de salud que pueda obstaculizar su capacidad de comunicarse con otras personas. El nuevo diseño también identificará a los veteranos y veteranos discapacitados, junto con su rama de servicio, en el frente de las tarjetas. Además, las nuevas características de la tarjeta cumplen con los estándares nacionales de la Asociación Estadounidense de Administradores de Vehículos Motorizados”, explicó el departamento en un comunicado.
Asimismo, el DPS señaló que al igual que con todas las licencias de conducir y tarjetas de identificación que había emitido desde principios de octubre de 2016, las nuevas tarjetas cumplirían con los requisitos de la legislación federal Real ID, como la estrella dorada en la esquina superior derecha.
Las identificaciones que se anunciaron hace cuatro años son las mismas que se emiten en este 2024. Se observa que se trata de una tarjeta con la bandera del estado en la parte superior izquierda, y en el fondo se puede ver la figura de la entidad con los colores blanco, azul y rojo, además de otros distintivos como una estrella y las letras del nombre del estado.
El DPS, al igual que los departamentos de otros estados, hacen hincapié a los residentes acerca de la fecha límite para obtener la Real ID, ya que a partir del 7 de mayo de 2025, solo se aceptarán las licencias de conducir y tarjetas de identificación que cumplan plenamente con la legislación federal para fines oficiales, como ingresar a edificios federales o abordar vuelos nacionales. Por lo tanto, es importante que se aseguren de tenerla.
Requisitos para sacar la licencia de conducir con Real ID en Texas
El Departamento emite licencias de conducir válidas por hasta ocho años a residentes del estado mayores de 18 años. Para obtener el documento, el solicitante debe presentar:
La licencia de conducir o identificación actual de Texas que cumple con la Real ID tiene una estrella dorada en la esquina superior derecha de la tarjeta. Si no tiene el distintivo, se podrá obtener en la próxima renovación o existe la opción de solicitar una identificación de reemplazo.
Todas las licencias de conducir de Texas, tanto las que cumplen con el distintivo de una estrella como las que no lo hacen, son válidas hasta la fecha de vencimiento que se muestra en la misma. Si se reemplazó o renovó la identificación después del 10 de octubre de 2016 y tiene el dibujo dorado, no se requiere ninguna otra acción por parte del solicitante.
Si la tarjeta no tiene la estrella, se puede continuar en uso después del 7 de mayo de 2025, pero solo será aceptada para fines relacionados con el estado, como manejar (solo licencia de conducir), realizar operaciones bancarias y votar. No será aprobada como identificación para propósitos federales.
LA NACION