Hugo Orlando Gatti trascendió los colores de las camisetas. Fue tan grande en el fútbol argentino que pasó por River y terminó jugando en Boca.
Fue uno de los grandes protagonistas estelares de los años 70 y 80 y, dentro de esa realidad que muchos pueden desconocer, un histórico arquero propuso que el Loco sea tenga un homenaje en el estadio Monumental, aprovechando el superclásico del próximo domingo por la fecha 15 del torneo Apertura.
«Si tengo que hacer análisis deportivo de Hugo, fue un revolucionario del arco, empezó a cambiar la historia del arco. No lo catalogo como un arquero, sino como un jugador de fútbol que se calzaba los guantes y era el actor principal del espectáculo, un protagonista, el actor principal de la obra», arrancó Carlos Goyén, ex arquero uruguayo que se destacó en Independiente y Argentinos durante la década del 80.
«Hacía todo por intuición, siempre estaba adelantado. Fue ídolo de muchos. Es una muy linda oportunidad el superclásico del domingo para que sea homenajeado por ambos clubes, porque también tuvo su pasaje por River. Pero por ser un arquero diferente a lo que era Amadeo Carrizo no pudo competir por el arco», agregó en Mundo Boca Radio en AM1350.
El último adiós al Loco Gatti
Gatti fue velado durante este lunes en la Legislatura Porteña, donde concurrieron varias personalidades del mundo del fútbol. Los restos del Loco estuvieron de 10 a 17 en Avenida Presidente Julio Argentino Roca 575. Allí asistieron Juan Román Riquelme, Navarro Montoya, Pato Fillol, Pipa Higuaín, Guillermo Coppola y Enrique Hrabina, entre otros.
Boca envió una corona al velorio de Gatti, donde estuvo el presidente de la institución, que se marchó sin prestar declaración, luego de sacarse fotos con algunos hinchas. «Fue un personaje que marcó una época, fue un pionero», marcó Guillermo Cóppola con los medios presentes.
«Él era Boca y yo River; hoy más que al deportista vengo a despedir a un amigo», sostuvo el Ubaldo Matildo Fillol. Además, Quique Hrabina, otro emblema del mundo Boca, recordó al Loco Gatti: «Él quería ganar todo, no le gustaba ir al arco en los entrenamientos».
BP