El atacante se suicidó tras el ataque. Hay 28 heridos y conmoción en todo el país.
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Este martes una tragedia sacudió a la ciudad de Graz, la segunda más grande de Austria, cuando un joven de 22 años ingresó al colegio secundario BORG Dreierschützengasse con un arma de fuego y abrió fuego contra estudiantes y docentes.
El ataque dejó un saldo provisional de al menos diez personas fallecidas, incluyendo al agresor, y otras 28 heridas, de las cuales cuatro permanecen en estado crítico.
Un ataque planificado
El atacante, identificado como un exalumno de la institución, portaba una pistola y una escopeta, ambas registradas legalmente.
Según las primeras investigaciones, ingresó al colegio alrededor de las 10:00 (hora local), disparó dentro de dos aulas y luego se suicidó en el baño del establecimiento.
Las autoridades aún no han confirmado el móvil del hecho, aunque se especula que el joven atravesaba problemas de salud mental.
El ministro del Interior, Gerhard Karner, indicó que el joven no tenía antecedentes penales, aunque había señales previas que podrían haber alertado a su entorno.
Operativo y reacción oficial
Inmediatamente después de los primeros disparos, se activó un operativo de seguridad que incluyó la intervención de las fuerzas especiales «Cobra», personal médico de emergencia y helicópteros policiales.
La escuela fue evacuada en su totalidad y se habilitaron dos centros de atención para familiares y alumnos: la sala Helmut-List-Halle y el estadio ASKÖ.
Tragedia nacional
El canciller austríaco, Christian Stocker, calificó el hecho como «una tragedia nacional» y suspendió su agenda para viajar a Graz. Por su parte, el presidente Alexander Van der Bellen expresó su profunda consternación y dijo: «Este horror no puede describirse con palabras».
También se expresó la jefa de la diplomacia europea, Kaja Kallas, quien lamentó el hecho y sostuvo que “las escuelas deben ser espacios seguros, libres de violencia y miedo”.
Dolor, luto y debate por las armas
El ataque reavivó el debate en Austria sobre el acceso a las armas de fuego. Aunque el país posee leyes relativamente estrictas respecto a su tenencia, todavía existen vacíos legales en la venta privada y los controles psicológicos a los portadores.
Se trata del tiroteo escolar más grave en la historia moderna del país. Graz ya había sido escenario de otra tragedia en 2015, cuando un hombre atropelló a decenas de personas en el centro de la ciudad, matando a tres.
Las banderas fueron izadas a media asta y el gobierno declaró jornada de duelo nacional.
Una comunidad devastada
Mientras las autoridades intentan reconstruir la cronología exacta del ataque, la ciudad de Graz permanece conmocionada. Equipos de asistencia psicológica acompañan a los sobrevivientes y familiares de las víctimas.
En redes sociales, miles de mensajes expresan dolor, solidaridad y una exigencia común: que tragedias como esta no se repitan.
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