El Gobierno del presidente Javier Milei inició un proceso obligatorio de revalidación de inscripción para los clubes de barrio y pueblo, con el fin de que puedan mantener los subsidios a las tarifas de luz y de gas. La medida se tomó luego de que se descubriera que reconocidas entidades deportivas de importante magnitud usaban una fachada para aprovecharse de los beneficios.
“Se inicia un proceso obligatorio de revalidación de inscripción para los clubes de barrio y pueblo para que puedan acceder a las tarifas subsidiadas de luz y de gas”, anunció este miércoles el vocero presidencial, Manuel Adorni. La medida se toma en el marco de un proceso de quita de privilegios que está llevando adelante el Gobierno nacional.
“Es importante aclarar que ningún club que necesite subsidio va a dejar de recibirlo”, remarcó el vocero ante posibles confusiones respecto a la medida.
Manuel Adorni
Manuel Adorni, vocero presidencial
Desde el Gobierno explicaron que varios clubes de élite, que lejos están de ser efectivamente clubes de barrio o de pueblo, mantuvieron subsidios a los servicios, aprovechándose del beneficio sin necesitarlo. “Todos estos clubes han sido desafectados y dejaron de recibir subsidios”, anunció el vocero y más tarde enfatizó: «La energía cuesta y quien pueda pagarla, la tiene que pagar”.
En el listado de entidades alcanzadas por esta revisión figuran clubes que tienen convenios con importantes cadenas de gimnasios, clubes de deportes profesionales y hasta algunos que tienen oficinas comerciales donde también usaban el subsidio.
facturas subsidios
A modo de ejemplo, Adorni mencionó a “un famoso club de regatas en Olivos, un club de rugby de nombre extranjero con sede en avenida Del Libertador que tiene un valor de cuotas cercanas a 100 mil pesos por mes, e incluso un club de fútbol que actualmente compite en la segunda división del a AFA”.
El vocero indicó que un club de Belgrano, que tendría que haber pagado 22 millones de pesos en servicio públicos, solamente pagó 13 millones. «Es decir que los argentinos les subsidiamos en casi 9 millones de pesos cuando no correspondía”, ejemplificó. Otro caso se dio en un club de la Ciudad de Buenos Aires, el cual tendría que haber pagado 57 millones, pero pagó 34 gracias a los subsidios.
“Esta medida, como siempre, es un paso más para sanear el esquema tarifario devastado en virtud del despilfarro que se hizo en las últimas dos décadas, destinando 150.000 millones de dólares en subsidios. Despilfarro que terminamos pagando con emisión monetaria y con su consecuente inflación, además de la falta de inversión en el sistema”, cerró Adorni en conferencia de prensa.
Comunicado oficial del Gobierno
La Secretaría de Energía, bajo el mando de María Tettamanti, emitió un comunicado explicando los alcances de la medida:
“Durante años, se permitió que el régimen de subsidios energéticos fuera objeto de abusos intolerables. En este sentido, se detectaron casos de clubes con gimnasios concesionados de manera privada, medidores subsidiados en oficinas comerciales, instituciones con acceso restringido y fines elitistas, e incluso clubes que desarrollan deportes profesionales con manifiesta capacidad de pago. Todas estas situaciones ya fueron corregidas y esos clubes ya fueron excluidos del régimen de subsidios”, indica el texto oficial.
Enfatiza que “ante las nuevas medidas, es importante aclarar que ningún club que necesite el subsidio dejará de recibirlo. Por eso, se buscará que cada institución valide su permanencia en el beneficio mediante la plataforma TAD (Trámite a Distancia) y bajo declaración jurada. Posteriormente, el Gobierno Nacional aplicará criterios objetivos de inclusión y exclusión para garantizar que solo reciban el subsidio quienes realmente lo necesitan».
A su vez, agrega: «Esta medida representa un nuevo paso hacia el saneamiento de un sistema tarifario distorsionado por años de despilfarro con más de 150.000 millones de dólares dilapidados en subsidios mal asignados durante las últimas dos décadas. Un derroche que se financió con emisión monetaria, generando inflación y descapitalización del sistema energético».
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