Hay películas inolvidables y que marcan un antes y un después en varias generaciones, que sin importar el tiempo que pasen siguen causando sensaciones en el público; y esto pasó con Un detective suelto en Hollywood, la cual protagonizó Eddie Murphy en 1984. En las últimas horas, la cuarta entrega desembarcó en Netflix y ya está entre las más vistas.
El intérprete de 63 años volvió a ponerse en la piel de Axel Foley, un agente de policía atrevido e indisciplinado de Detroit, que viaja hasta los barrios más lujosos de Los Ángeles para detener a los criminales que asesinaron a su amigo. Sin embargo, en esta nueva entrega, la cual está bajo la dirección de Mark Molloy y guionada por Will Beall, Tom Gormican y Kevin Etten, Foley se une a su hija, interpretada por Taylor Paige, y a su nuevo compañero, papel que tiene Joseph Gordon-Levitt. Asimismo, contará con la ayuda de sus fieles amigos, Billy Rosewood (Judge Reinhold) y John Taggart (John Ashton), quienes regresan para colaborar en esta peligrosa misión.
¿La trama? Salvar a su hija de las constantes amenazas que recibe. Para esto, Foley deberá emplear sus habilidades detectivescas y apoyarse tanto en su hija como en sus viejos amigos.
Cabe recordar que la nueva entrega llega después de dos secuelas: Un detective suelto en Hollywood II (1987) y Un detective suelto en Hollywood III (1994), las cuales ubicaron a Foley como un personaje icónico del cine.
La cinta, la cual fue rodada en diversas locaciones de Los Ángeles, California, que cuenta con efectos especiales y secuencias de acción diseñadas por un equipo de expertos que trabajaron en proyectos similares, dura 1 hora y 57 minutos y, hasta el momento, está primera en el ranking de lo más visto en Argentina dentro de la gigante del streaming.
En una de sus últimas entrevistas, el actor y director de cine estadounidense contó una anécdota sobre una charla que tuvo con Marlon Brando, el protagonista de El Padrino. “De golpe había un montón de famosos a los que yo había visto en la tele desde chico, que querían comer conmigo. Y después de 48 horas, Marlon Brando llamó a mi agente y dijo que quería conocerme. Si ahora lo pienso, me doy cuenta de que era una locura, que el actor más grande de todos los tiempos quería que cenáramos juntos. Pero en ese momento, yo creía que así era el juego, que hacías una película y de golpe Marlon te llamaba”, recordó en una charla con el podcast The Interview.
Sin embargo, lo que más llamó la atención fue cuando se dijo que se reunió dos veces con Brando y detalló cómo fueron sus encuentros, en los que le mencionó a qué actor no soportaba, algo que lo dejó sin palabras. “Él me decía que no soportaba a ´ese chico con la pistola´. Y yo le preguntaba a qué chico con la pistola, y me respondía: ´¡Ese, el del póster!´. Entonces le digo si se me hablaba de Clint Eastwood, y me dice: ´¡Sí, ese tipo!´. Simplemente, se refería a Clint Eastwood como ese chico”, contó.
LA NACION