El presidente Javier Milei monitorea el operativo de seguridad desde que encabeza Patricia Bullrich en las afueras del Congreso desde Casa Rosada. Esto ocurre a siete días de la represión por parte del Ministerio de Seguridad ocurrida en el mismo lugar, donde se registraron incidentes. Las fotografías del pasado miércoles que mostraron la respuesta policial impactaron en Balcarce 50 y desde allí buscan «desincentivar» la escalada de violencia que se vivió luego de que oficiales de las cuatro fuerzas de seguridad reprimieran a los manifestantes.
Más de 2.000 efectivos, entre policías de la Ciudad y fuerzas federales, se dispondrán en el Congreso y sus alrededores. Además, se indicó que a los 900 policías de la fuerza porteña que pondrá el Gobierno de la Ciudad se sumarán 720 policías federales y unos 400 entre miembros de Gendarmería Nacional y Prefectura Naval.
En relación a la Policía Federal, para esta ocasión «prácticamente se duplicó» la cantidad de efectivos, algo que también copiarían Gendarmería Nacional y Prefectura Naval.
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16.23 – Se acercan los primeros manifestantes
Los manifestantes que se movilizaron por el reclamo de los jubilados llenaban esta tarde la Plaza del Congreso y las principales arterias de la zona permanecían cerradas al tránsito debido al control policial.
Los jubilados volvieron a marchar hoy hacia el Congreso acompañados por sectores opositores, luego de los graves incidentes ocurridos la semana pasada con un saldo de heridos y cientos de detenidos.
16.20 – Milei sigue el operativo desde Casa Rosada
Con el fotoperiodista Pablo Grillo internado en el Hospital Ramos Mejía a raíz de una herida de gravedad producto del impacto de un gas lacrimógeno lanzado por un gendarme, la idea es evitar los enfrentamientos y limitarse a «mantener el orden público». De hecho, una importante fuente con acceso al despacho presidencial reveló a Noticias Argentinas: «Si tengo que ser cínico, por supuesto que sirve que tiren piedras, porque le va a recordar a la sociedad de que está hablando cuando montamos en el operativo». Sin embargo, también aclaró que la directiva es no abonar a la tensión de la calle.
Pasado el mediodía, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, encargada del diseño del despliegue policial visitó el despacho de la secretaria genera de la Presidencia, Karina Milei. A su vez, Casa Militar desplegaba un vallado a la altura de calle Reconquista para blindar el acceso a la manifestantes, para evitar que los manifestantes puedan acercarse a las inmediaciones del palacio legislativo.
Mediante su cuenta de X (ex Twitter), Bullrich publicó un mensaje de advertencia: «Marcha o violencia: no es lo mismo. Alterar el orden público y la vida democrática es un delito federal. Si hay violencia, alejarse. Las Fuerzas actuarán». Y es que en el Poder Ejecutivo atribuyen la convocatoria a la izquierda y al kirchnerismo, y dan por descartada la presencia de barras bravas, pero insisten con que se trata de una «una marcha política» que apunta a «desestabilizar».
Bajo esa premisa, utilizaron el sistema de comunicación de las estaciones de trenes del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) para emitir mensajes disuasivos a los manifestantes. En las pantallas y altavoces de las terminales se proyectó la advertencia: «La policía va a reprimir todo atentado contra la República».
En el Gobierno esperan más gente en la marcha de este miércoles, pero creen que será «tranquila»
15:00 – En qué consiste el operativo de Seguridad
Por estas horas, 900 policías se encuentran apostados en los alrededores del Parlamento, en un operativo conjunto con fuerzas federales. Además, se retiraron 350 contenedores de residuos en la zona para evitar que sean utilizados en posibles enfrentamientos. Sin embargo, y pese a que aseguran no detectar diferencias con la movilización del pasado miércoles, el Ministerio de Seguridad dispuso de un protocolo particular que consiste en el despliegue de un extenso vallado que blinda los principales accesos al Congreso.
El trazado de la «zona estéril» apuesta a evitar que las fuerzas de seguridad establezcan contacto con los manifestantes, y a concentrar la protesta en la plaza para que las calles y avenidas no estén afectadas, aunque para instrumentarlo, la cartera debió interrumpir la circulación.
El operativo fue coordinado el pasado martes por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; el titular de la SIDE, Sergio Neiffert, su segundo, Diego Kravetz; el vicejefe de Justicia, Sebastián Amerio, y el secretario de Transporte, Franco Mogetta; en el despacho del asesor presidencial, Santiago Caputo.
En desarrollo…
TC