En la Ciudad cayeron los ingresos reales y aumentó la desigualdad: los jubilados son los más perjudicados

Ismael Bermúdez

En un contexto de reducción de las tasas de actividad y de empleo, los ingresos en la Ciudad de Buenos Aires crecieron muy por debajo de la inflación en el segundo trimestre de 2024, según el Instituto de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires.

Con un aumento interanual promedio de precios del 281,6%, los ingresos individuales crecieron 248,6%; los ingresos laborales 254,7%, y los no laborales 235,2%. En particular, dentro del universo de ingresos no laborales, se destaca el fortísimo deterioro de los ingresos jubilatorios que crecieron 166.7%, 115 puntos menos respecto de la inflación, señala el Informe porteño.

Además, hubo un deterioro en la distribución del ingreso, tanto a nivel individual como de los hogares.

Los ingresos individuales promedio de los porteños que viven en el norte de la Ciudad son 87% superiores a los de quienes viven en el sur de la Ciudad,

El INDEC registró para la primera mitad de 2024 una pobreza en la Ciudad del 23,1% : 695.763 personas, de las 224.770 eran indigentes.

El Informe porteño destaca :

  • El ingreso total familiar promedio fue de $1.103.451, lo que representa una suba del 245,4% con respecto al mismo período del año anterior, 36,2 puntos. por debajo del incremento correspondiente al IPCBA, de 281,6%
  • Los hogares residentes en el Sur de la Ciudad tuvieron un alza interanual del 231,5% ($880.720), por debajo de los del Norte, cuyo incremento resulta del 278,0% ($1.364.130). En el Centro, el ingreso total familiar sube 235,2% ($1.074.944).
  • Los hogares del Norte presentan un ingreso per cápita familiar más alto, que equivale a más de dos veces el del Sur.
  • El 30% de los hogares de menores ingresos per cápita concentraron el 37,5% de las personas, pero sólo el 12,8% de la suma de ingresos. En tanto, los que se ubican en el 30% superior involucran al 22,6% de los residentes y más de la mitad de la masa de ingresos (51,7%).
  • El 10% de los ocupados con menores ingresos percibió menos de $150.000 en su ocupación principal. En contraste, el 10% de quienes tienen mejores ingresos supera $1.500.000. En promedio, el último decil gana más de 28 veces lo que gana el primero.
  • Dentro de los ingresos no laborales, las jubilaciones y pensiones son las que mayor pérdida de poder adquisitivo tienen en el último año, con una variación de 166,7%.
  • Hubo un deterioro en la distribución de los ingresos tanto sobre las personas como sobre los hogares. El coeficiente de Gini tuvo un aumento lo que indica un incremento de la desigualdad. Así para el ingreso total familiar se ubicó en 0,423 (por arriba del mismo período del año anterior, cuando era de 0,403). Para la población, el ingreso per cápita familiar se incrementó a 0,436 (desde 0,427 un año antes), marcando en este caso también una mayor desigualdad. Algo similar pasó para la población ocupada, en la que el Gini de ingresos de la ocupación principal es de 0,435, por arriba del correspondiente al mismo periodo de 2023, cuando se ubicó en 0,404.

SN

Ismael Bermúdez

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